Queridas hermanas,

Nuestra Cofradía es el reflejo de una historia forjada con esfuerzo, entrega y amor. Sus orígenes se remontan a aquellas primeras hermanas que, con valentía y devoción, le dieron vida , creando un lazo indisoluble que ha perdurado a lo largo de los años. Gracias a su compromiso, su espíritu de servicio, hoy seguimos aquí, manteniendo vivas nuestras raíces y proyectándonos hacia el futuro con la misma pasión y dedicación.

Muchas hermanas han trabajado y trabajan sin descanso, dedicando su tiempo, su ilusión y su cariño para fortalecer esta Cofradía. Ellas han sido y son, el pilar sobre el que nos sostenemos, y a
ellas debemos nuestro presente y nuestro futuro. Sin su esfuerzo, su generosidad y su amor incondicional, nada de lo que somos hoy sería posible.

Pero ser parte de la Cofradía María del Dulce Nombre es mucho más que formar parte de una tradición; es sentir que nuestro corazón verde late al unísono, con fuerza y determinación. Es compartir un propósito común, estar unidas, apoyarnos mutuamente y hacer de esto un refugio de fraternidad y compromiso.

Hacer Cofradía significa trabajar juntas, cuidar y valorar a cada hermana, porque ellas son nuestro mayor tesoro y la razón por la que seguimos adelante con ilusión y entrega.

Miramos al futuro con esperanza, con grandes proyectos y con el firme propósito de seguir creciendo, siempre apostando por nuestras hermanas y por el espíritu de unión que nos define.

Esta página es un punto de encuentro para todas nosotras, un espacio donde podremos compartir nuestra historia, nuestras actividades y la manera en que seguimos honrando aquello que nos une.

Sigamos adelante con orgullo, con fe en nuestro camino y con el amor que nos fortalece. Que cada paso que demos, lo hagamos juntas, porque solo así nuestra Cofradía seguirá brillando con la luz que le da sus hermanas.

Que la Virgen del Camino, María del Dulce Nombre y Nuestro Padre Jesús del Consuelo, nos protejan siempre.